UNA INSPIRACIÓN CONFUSA - CAPÍTULO 1

fin. Acababa de finalizar mi último trabajo de clase de todo el curso, me sentía tan bien... Para la asignatura de Lengua nos habían pedido que hiciéramos un relato de cómo queríamos que fuese nuestro verano. Y pues para ser sincera, no me había gustado mucho el resultado. Tenía una cantidad inmensa de exámenes y lo único en lo que tenía que pensar era en que tenía que estudiar muchísimo para la recuperación del anterior examen de Física y Química. Estaba demasiado agobiada como para esforzarme al máximo en el trabajo y perder tiempo de estudio. En general, el relato -por llamarlo así- trataba sobre cómo serían mis vacaciones en el chalet de mis abuelos. Nada del otro mundo, aunque ahora que lo pienso... la recuperación la tengo mañana y ya llevo dos horas estudiando, ahora tengo un rato libre y la verdad que no me apetece nada más que o leer un buen libro o escribir algo interesante, teniendo en cuenta que puntos extra en actitud nunca vienen de más. Voy a escribir algo...

Bajé al salón a por algo para picar y justo cogí una bolsa medio vacía de patatas fritas. Me eché en la botella algo de Coca Cola y me subí a mi habitación. Allí, con mi aperitivo sobre la mesa junto a mi bolígrafo de gel de tinta negra y un par de hojas de papel cuadriculado, me puse a escuchar música en busca de algo de inspiración. Mientras escuchaba el famoso tema “Positions”, de Ariana Grande, se me ocurrió escribir algo sobre la planificación y la ejecución de un misterioso plan conspiratorio en la Casa Blanca. Ya estaba todo pensado mientras que una tormenta de ideas inundaba mi sobrecargada mente.

La idea era: Una banda llamada “A la sombra del Estado” planearía un golpe contra el actual presidente de los Estados Unidos. Primero tendrían un centro de operaciones en Brooklyn y, una vez todo pensado, atacarían de la forma más rebuscada y enrevesada la enorme fortaleza estadounidense.

Cuando lo escribí, lo revisé y lo imprimí para corregirlo con mi profesor al día siguiente. Y menos mal que no llegué a imprimirlo porque ahora una nueva preocupación atacaba mi mente de forma evasiva. ¿Cuál era? Pues bien, resulta que, al ir a cenar, mis padres estaban viendo el telediario. Y una noticia de última hora interrumpía la entrevista a un político. Esa noticia informaba de un fallido golpe que una banda terrorista había intentado ejecutar contra el Gobierno de los Estados Unidos, más concretamente contra su actual presidente. Al escuchar las palabras emitidas por el periodista, le dije a mis padres que no tenía ganas de cenar. Me subí a mi habitación y me puse muy nerviosa. Una extraña sensación me recorría desde la punta de mi dedo índice hasta el lugar más estrecho de mi cuerpo, esa preocupación de pensar que había podido ser una coincidencia, la inquietud de pensar, ¿qué pasaría si borrara lo escrito en esas viejas hojas de archivador? ¿Todo volvería a la normalidad? ¿Sería aún peor? No sabía qué pensar, lo único que tenía claro era que conociéndome, esa noche me sería imposible dormir. Y así sucedió, miles de preguntas atosigaban mi mente y lo peor era que al día siguiente tendría la recuperación del examen  a primera hora. Lo menos alocado que pensé esa noche fue: ¿Y si mi sueño nunca hubiera sido ser escritora? O sea tal vez esto sea por alguna causa que no soy capaz de comprender... A ver, aquí ya empecé a desvariar y del sueño que tenía y el dolor de cabeza, me dormí.

Silvia O.



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